Julian Assange, el cofundador de Wikileaks en 2006, enfrenta una acusación formal de 18 cargos, alegando un complot para piratear computadoras y una conspiración para obtener y divulgar información de defensa nacional.
El caso sigue a la publicación de WikiLeaks de cientos de miles de documentos filtrados en 2010 y 2011 relacionados con las guerras de Afganistán e Irak , así como cables diplomáticos.
Los fiscales dicen que Assange, de 49 años, ayudó a la analista de defensa estadounidense Chelsea Manning a violar la Ley de Espionaje, fue cómplice de piratería informática por parte de otros y publicó información clasificada que puso en peligro la vida de informantes estadounidenses.
Assange niega haber conspirado con Manning para descifrar una contraseña encriptada en las computadoras del Departamento de Defensa de EE. UU. Y dice que no hay evidencia de que la seguridad de nadie haya estado en riesgo.
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Está previsto que comparezca en Old Bailey el lunes, donde la jueza de distrito Vanessa Baraitser pronunciará su sentencia sobre si debe ser extraditado para enfrentar los cargos en Estados Unidos.
Los abogados de Assange han dicho que enfrenta hasta 175 años de cárcel si es declarado culpable, aunque el gobierno de Estados Unidos dijo que era más probable que la sentencia fuera de entre cuatro y seis años.
Kristinn Hrafnsson, editora en jefe de WikiLeaks, dijo: “El mero hecho de que este caso haya llegado a los tribunales y mucho menos que haya durado tanto tiempo es un ataque histórico a gran escala a la libertad de expresión”.
“El gobierno de Estados Unidos debería escuchar la oleada de apoyo proveniente de los principales editoriales de los medios de comunicación, ONG de todo el mundo como Amnistía y Reporteros sin Fronteras y las Naciones Unidas, que están pidiendo que se retiren estos cargos. Esta es una lucha que afecta el derecho de todas y cada una de las personas a saber y se libra colectivamente”, agrega.
Se espera que la prometida de Assange, Stella Moris, con quien tiene dos hijos pequeños, asista a la corte el lunes junto con su equipo legal. Ella ha estado entre los partidarios que instan a Donald Trump a indultar a Assange antes del final de su presidencia.
RECLUIDO EN PRISIÓN
Assange ha estado recluido en la prisión de alta seguridad de Belmarsh desde que la policía lo sacó de la embajada ecuatoriana en Londres antes de ser arrestado por violar las condiciones de su fianza en abril de 2019.
Había ingresado al edificio en 2012 después de agotar todas las vías legales para evitar la extradición a Suecia para enfrentar acusaciones de delitos sexuales, que siempre ha negado y finalmente fueron retiradas, según informa Daily Mail.
El equipo legal de Assange afirmó que la acusación bajo la administración de Trump tuvo motivaciones políticas después de que una investigación iniciada durante la presidencia de Barack Obama no presentó cargos.
Durante su campaña electoral de 2016 contra Hillary Clinton, Trump dijo ‘Me encanta WikiLeaks’ después de que el sitio web publicara correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata (DNC) pirateados por Rusia.
En la audiencia de extradición de Assange se le dijo que se le ofreció un indulto en agosto de 2017, supuestamente en nombre del presidente de Estados Unidos, a cambio de identificar la fuente de los correos electrónicos.
El Old Bailey escuchó evidencia de que Assange ha sido diagnosticado con síndrome de Asperger y los psiquiatras de la defensa dijeron que sufre de depresión severa y tiene un alto riesgo de suicidio.
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